Ante meses de silencio administrativo tras las alegaciones de los escaladores murcianos para impedir la prohibición del sector El Santuario y la actual amenaza de desequipamiento por parte de Medio Natural, el Defensor del Pueblo ha accedido a mediar entre Escalada Sostenible Murcia y la Administración.
Hace ahora más de un año que comenzó el que, hasta la fecha, ha resultado ser el conflicto más serio en la zona murciana de escalada llamada El Santuario. Y es que, a finales de agosto del 2020, el dueño de la finca colindante con la pared acusó, a través de un periódico regional, al colectivo de escaladores/as de “allanar su morada” para escalar. Esto supuso la paralización total de esta práctica deportiva en la zona hasta la actualidad.
El Santuario es uno de los pocos sectores de escalada deportiva con vías de alta dificultad de la Región de Murcia. Por esta razón, nunca ha sido una zona masificada. Si bien, al contrario, ha hecho de este rincón un lugar de atractivo único para deportistas del más alto nivel.
Desde ese momento hasta el día de hoy han sido varios los episodios conflictivos con el dueño de la finca vecina; este ha contado con el apoyo de algunos agentes forestales de la Consejería de Agua, Agricultura, Ganadería, Pesca y Medio Ambiente de la Región de Murcia. Así, bajo el argumento de que la sierra en la que se ubica el sector es zona ZEPA, los agentes han acudido en algunas ocasiones a echar a quienes han encontrado escalando bajo la amenaza de multa. Sin embargo, aún no existe legislación sobre la actividad y uso de este espacio natural. Por otro lado, tal y como ocurre en centenares de zonas de escalada, el hecho de que se trata de zona de especial protección para las aves, no implica la prohibición de nuestra actividad. El objetivo de una futura normativa sería el de velar por un equilibrio respetuoso entre las prácticas deportivas y las especies que habitan la zona.
Los escaladores mueven ficha
La cuestión es que aquella noticia publicada hace más de un año motivó la acción de los/as escaladores/as frecuentes de la zona. Bajo el amparo de Escalada Sostenible llevaron a cabo consultas al catastro, registro de la propiedad, al Ayuntamiento de Mula, a Medio Natural, etcétera, con la finalidad de conocer la titularidad de la pared y del pie de vía del sector. La finca superior es de propiedad pública y, por ende, los escaladores/as siempre han entendido que la pared (talud) que generan dos terrenos a diferentes alturas pertenece a la finca superior; por lo que en este caso, la pared de escalada sería monte público y escalar allí no supondría un “allanamiento de morada”.
Por supuesto, también se contactó con el dueño de la finca colindante, pero se mostró cerrado a la comunicación.
Los primeros escritos y acciones administrativas tuvieron lugar en septiembre de 2020. No hubo respuesta. En octubre de ese mismo año, se inició una campaña de recogida de firmas, con difusión el algunos medios locales, como esta entrevista de la radio regional y la publicación de otra entrevista en Desnivel. Pero tampoco se obtuvo respuesta alguna.
Nuevas acciones y amenaza de desequipamiento
Con los confinamientos perimetrales y la llegada del invierno, la actividad se paralizó y se reactivó en la primavera del 2021, que es cuando se inicia la temporada de escalada en el sector. Pero apenas dio tiempo a volver a presentar un escrito a Medio Natural ante su silencio administrativo (el 19 de abril), ya que el 21 de abril, esta administración comunicó a la Federación de Montaña de la Región de Murcia que se iba a proceder al desequipamiento de las vías de escalada del sector El Santuario, mediante una notificación que no se refería a ningún procedimiento legal que lo justificara.
A partir de ahí, el colectivo escalador se lanzó a presentar alegaciones individuales a la notificación de Medio Natural, Escalada Sostenible presentó una propia gracias al asesoramiento jurídico del abogado de la entidad, y también lo hizo la propia Federación de Montaña a petición de algunos clubes de escalada de la Región y la mediación de miembros de Escalada Sostenible Murcia. Nadie ha recibido ninguna respuesta ni se tiene constancia de que se hayan iniciado las labores de desequipamiento. Por tanto, el pasado septiembre nos vimos obligados/as a recurrir al Defensor del Pueblo y solicitar que medie entre Escalada Sostenible Murcia y la Administración, a lo cual ha accedido.
Este ha sido el primer organismo que ha tenido a bien atender las demandas en pro de esclarecer una situación que, precisamente por el silencio administrativo y la forma de proceder, resulta poco transparente.
En definitiva, la presión a la que parte del colectivo escalador se ve sometido por prohibiciones en algunas zonas de escalada, sin estudios previos y específicos sobre dicho entorno, insta a estos seguir buscando respuestas que den fundamento y base legal a la limitación de derechos fundamentales como el de “Disfrutar de un medio ambiente adecuado para el desarrollo de la persona, como el deber de conservarlo» (artículo 45 de la Constitución Española).
Por Violeta Carrillo, delegada de Escalada Sostenible Murcia